Problemas con los vertederos de Puerto Rico: todo lo que necesita saber

Published May 09, 2022

Según un estudio encargado por la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) y realizado por la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (EPA), Puerto Rico podría quedarse sin espacio en los vertederos en 2 a 4 años. Este problema de capacidad identificado desde hace mucho tiempo se ha visto agravado por las toneladas de escombros que dejaron dos huracanes consecutivos que devastaron la región en 2017.

Sin embargo, al menos dos grandes empresas de residuos puertorriqueñas creen que la falta de capacidad no es el problema subyacente. Los sitios más grandes afirman que probablemente puedan recoger la basura durante más de 30 años. Afirman que los problemas están relacionados principalmente con el cumplimiento y la mala gestión, que parecen ser el resultado de la limitación de los recursos. Continúe leyendo para obtener más información sobre los problemas de los vertederos en Puerto Rico.

Situación de los vertederos de Puerto Rico

Randy Jensen, presidente y director ejecutivo de EC Waste, afirma: «Hay una crisis absoluta de vertederos en Puerto Rico, pero no se trata del espacio aéreo. Es que todavía permitimos que 22 vertederos sin revestimiento acepten residuos. Si bien tenemos reglamentos, su cumplimiento en la isla no es coherente. Creo que es necesario aplicarlas de manera más coherente en todos los sitios de recepción de residuos».

Los municipios son propietarios de la mayoría de los vertederos. Y, en su mayor parte, se les permite operar como les plazca, según Carlos Contreras, director ejecutivo y presidente de Consolidated Waste Services, que administra cinco vertederos que atienden a 19 jurisdicciones. Algunos de los vertederos que administra están revestidos, pero no todos.
La ley permite a los operadores de sitios anteriores al subtítulo D agregar celdas alineadas si la parte restante del sitio sin línea está cerrada. Como ya se ha determinado que este espacio cumple con un uso permitido, la expansión debe realizarse dentro del espacio original del vertedero. Según Ivelisse Estrada, presidenta de Ecosystems, Inc., muchos operadores puertorriqueños que están añadiendo celdas revestidas no cierran las partes sin revestimiento y, a veces, esas celdas permanecen activas.

Otro problema parece ser la lentitud del progreso administrativo. Contreras afirma que tiene dos vertederos que deben ampliarse para cubrir las partes cubiertas con el subtítulo D y que lleva cuatro años esperando la aprobación del permiso.

El retraso y los problemas que permiten el funcionamiento de los vertederos que no cumplen con las normas se deben principalmente a la falta de financiación y experiencia técnica.

Según algunos de los operadores de la región, otro problema es la distribución desigual de las instalaciones, lo que ha resultado en un campo de juego desigual. La mayoría de los vertederos de la parte noreste de la isla han alcanzado su capacidad máxima y han sido cerrados, y aquí es donde se produce la mayoría de los residuos. Hay muchos sitios en el suroeste, pero no hay muchos residuos. La competencia es feroz en el sudoeste, y los operadores reducen sus propinas a un nivel tan bajo que se ven obligados a invertir en recursos para cumplir con las regulaciones del subtítulo D.

Mientras tanto, según el director ejecutivo de EC Waste, Puerto Rico tiene casi 100 millones de yardas cúbicas de espacio aéreo que cumple con las normas y casi 40 millones de yardas cúbicas disponibles para la expansión (lo que equivale a más de 140 millones de toneladas en total).

La solución al problema de los vertederos de Puerto Rico

La División de Protección Ambiental del Caribe de la EPA está ayudando con fondos para la recuperación y está colaborando con socios locales y federales para identificar los mecanismos de reciclaje de los materiales de demolición.

La EPA de los Estados Unidos también está ayudando al gobierno puertorriqueño a revisar y permitir nuevas celdas de vertedero que cumplan con las normas. La EPA también emitió órdenes de autorización para algunos vertederos que no cumplían con las normas, por ejemplo, informándoles de que debían instalar cubiertas provisionales o sistemas de monitoreo de aguas subterráneas aprobados por la EPA en fechas específicas o se enfrentarían a sanciones.

Los vertederos más pequeños que no cumplan con las normas se verán obligados a cerrar en un plazo de cinco a siete años debido a la inundación excesiva de residuos. Contreras cree que, como resultado, habrá una competencia más leal. Sin embargo, es posible que algunos sitios grandes que no cumplan con las normas sigan aceptando residuos en el futuro.

La EPA presenta una queja contra el municipio de Puerto Rico por un vertedero

Departamento de Justicia de los Estados Unidos presentó una queja en el Distrito de Puerto Rico el 25 de febrero de 2021, en nombre de la Agencia de Protección Ambiental (EPA) de los Estados Unidos exigiendo que el municipio de Toa Alta deje de desechar residuos sólidos en su vertedero y tome medidas para abordar las amenazas para la salud pública y el medio ambiente que representan las condiciones peligrosas en el vertedero, que está siendo operado en violación de las leyes federales y del ELA sobre residuos sólidos.

La demanda también solicita que el tribunal ordene al municipio de Toa Alta pagar sanciones civiles por violar una orden de la EPA emitida en 2017 que abordaba los problemas en el vertedero.

Según la denuncia, el vertedero plantea tres amenazas principales:

  • El municipio de Toa Alta no está tomando medidas suficientes para evitar que grandes cantidades de lixiviados (agua mezclada con contaminantes dañinos que se filtran del vertedero) se escapen a los vecindarios cercanos, a las aguas superficiales y al acuífero subterráneo subyacente.
  • Las laderas del vertedero en ciertas áreas son inestables y pueden derrumbarse, lo que podría poner en peligro a las personas que trabajan en el vertedero y a los residentes cuyas casas están cerca del pie del vertedero.
  • La Municipalidad no ha colocado sistemáticamente la tierra requerida sobre los residuos que se desechan en el vertedero al final de las actividades de eliminación de cada día. El uso de esta cubierta vegetal, también conocida como cobertura diaria, evita que los insectos, las alimañas, las aves y los intrusos accedan a los residuos de los vertederos y ayuda a prevenir la propagación de enfermedades, como los virus del dengue y el Zika.

Con respecto a los problemas en este vertedero, la EPA está en contacto con el Departamento de Recursos Naturales y Ambientales de Puerto Rico. La EPA está colaborando con el departamento para mejorar la gestión de los residuos sólidos en Puerto Rico.

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